Vender para Comprar otra Vivienda

Y, ¿Cómo lo hago?

Nos surgen algunas preguntas al momento de plantearnos esta situación:

1.- ¿En qué momento comienzo a buscar la propiedad que voy a comprar?

2.- ¿Cómo voy a reservar la propiedad que me gusta, si aún no me han pagado por la venta de mi piso?

3.- ¿Cómo hago si no tengo donde irme a vivir al momento de vender mi vivienda, mientras consigo donde quiero comprar?

Pues si…

Son muchas las inquietudes que se le pasan a las personas que quieren vender su propiedad para comprar otra en otra zona, una más grande, etc

Solución

Estoy acostumbrada a ayudar a mis clientes a conseguir la compraventa simultánea de su vivienda por una vivienda nueva.

Es una práctica, donde REINAN los acuerdos entre las partes, y es que muchas veces las limitaciones sólo las pensamos nosotros y no el resto de personas. 

He ayudado a unas cuantas familias a conseguir esto, pero les quiero contar esta anécdota que me sucedió hace unos meses. 

Me contactó una persona llamémosle “Pepa”, para que le ayude a vender su propiedad y que de forma simultánea le ayude a comprar otra; en la primera visita le hice la exposición de mi propuesta de valor, cómo le vendería su inmueble y que es lo que podría pasar con los clientes que estuvieran interesados en su propiedad, además de explicarle los gastos de la venta y de la futura compra…

Quedé en hacer el Análisis Comparativo de Mercado en la zona, para que pudiera ajustar el precio lo mejor posible al mercado y a lo que “Pepa” necesitaba para la compra de su nueva vivienda (después de saber los gastos de la venta y la compra, muchas veces cambian de opinión, ya que no lo habían contemplado)

Pepa, en este caso, si lo había contemplado, me insiste en que le presente el análisis comparativo de mercado y el plan de marketing para el mismo día, lo hice, se lo presenté y quedó en “avisarme”, obviamente, le estuve llamando para saber su decisión de cuando comenzamos la venta de su propiedad…

Pues, me quedé esperando, hasta que me dijo que lo haría con una inmobiliaria online, que le cobraban la mitad de los honorarios que yo le había dicho que cobrábamos. Yo, me quedé perpleja, después de la insistencia, la presión de ella misma en saber todo, y como fue Pepa quien me llamó, porque me recomendaron, no la busque yo a ella, igualmente, ella decide usar otros servicios, lo dejamos ahí.

Pasan uno o dos meses, SORPRESA, es Pepa al teléfono…

Tiene un problema, y es que la inmobiliaria que decidió contratar, le dijo al principio que se encargaría de la negociación y ahora que ya está reservada la propiedad se da cuenta que no negociaron con los compradores las condiciones de la venta que ella deseaba, eran los siguientes:

• Contrato de arras de 4 meses
• Autorización de usar el dinero en depósito para reservar otra propiedad, después que aprobaran la hipoteca del comprador
• Negociar el tiempo de entregar las llaves después de la firma de compraventa en notaría a los compradores

Esto no ocurrió, esa inmobiliaria no ayudó con esta negociación a Pepa,  además, tampoco la ayudó en el último paso de la compraventa que era, recabar la documentación para enviar a notaria, lo tuvo que hacer la misma Pepa, y sin mencionar que me llamó también para que le revisara el contrato de arras que firmaría (que lo firmó sin enviármelo y sin revisar por nadie y por supuesto no estaba el acuerdo que ella quería al principio de la venta)

Al final, Pepa tuvo que conformarse con lo que tenía y mudarse de alquiler donde consiguió rápidamente pagando lo que fuera por tener un lugar donde vivir después de vender su propiedad, tuvo que hacer dos mudanzas, pudiendo evitarlo desde el principio. 

Sólo les cuento esta historia, para que sepan que hay opciones, no todo es negro o blanco, hay grises y que si nos anticipamos a las situaciones, podremos llegar a acuerdos satisfactorios para ambas partes (comprador/a y vendedor/a) 

También, tengo historias de clientes que han logrado vender y comprar con todo lo acordado, que no fue lo que le pasó a la protagonista de esta historia, aunque lo pasó mal por la desesperación de no saber qué hacer, hoy en día está muy feliz con su nuevo hogar.

Si quieres ser uno/a de ellos/as, escríbeme, estaré encantada de ayudarte

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